Gregorio Ramos Acosta, ex Síndico municipal de Tonalá con Jorge Arana Arana, y también presidente municipal por licencia del mismo Jorge Arana, quiere regresar al juego político en la Villa Alfarera, ahora haciendo mancuerna con José de Jesús Cruz Verjan, viejo conocido en el Tribunal de Arbitraje y Escalafón de Jalisco, pues su padre es el exmagistrado José de Jesús Cruz Fonseca.
Usando un puñado de extrabajadores del municipio de Tonalá, que fueron despedidos con la llegada de Juan Antonio González Mora, actual presidente municipal, y cuyos casos ya fueron resueltos conforme a derecho en el TAE, busca llamar la atención del Secretario General de Gobierno del Estado de Jalisco, Enrique Ibarra Pedrosa, por medio del bloqueo de calles en pleno centro de Guadalajara.
Lo ridículo del asunto es que ambos personajes Gregorio Ramos Acosta y José de Jesús Cruz Verjan, saben que quienes deben cumplir con los laudos ganados por los trabajadores es el quebrado financieramente Ayuntamiento de Tonalá, quienes seguramente seguirán recurriendo a argucias legales en lo Federal para alargar el tiempo y dejar esa papa caliente a la próxima administración municipal.
Sin embargo, el usar a los trabajadores que buscan cobrar el laudo ganado para generar una percepción de interés y liderazgo, solo para llevar agua a su molino y ser tomados en cuenta en MORENA Jalisco, muestra claramente que se trata de una vil estrategia de campaña.
Los señalamientos que durante sus bloqueos hacen contra el Maestro Ibarra, podrían revertirse en su contra próximamente, exhibiendo malos manejos legales y corruptelas en la anterior administración de Tonalá y del TAE.
Aún no empiezan las campañas, y ya está en grande la guerra sucia, lo que tendremos que aguantar los ciudadanos los próximos días.