Una orden del presidente de EEUU, Donald Trump, para suspender temporalmente la inmigración en EEUU durante la pandemia de COVID-19 no afecta la actividad económica y comercial bilateral, dijo el presidente Andrés Manuel López Obrador.
«Hay que tomar en cuenta que no se paraliza la actividad económica comercial y que no va a haber limitaciones para los trabajadores agrícolas migrantes», respondió el mandatario en conferencia de prensa.
A una pregunta sobre el anuncio de su homólogo estadounidense, el 22 de abril, el jefe del Ejecutivo respondió que «nos necesitamos mutuamente, ya no se podría cerrar la frontera por completo porque existe un nivel de integración que hace indispensable que se mantenga abierta».
Trump dijo que el decreto busca proteger los trabajos y conservar los recursos médicos para los estadounidenses durante la pandemia de COVID-19.
La medida adoptada por EEUU estará vigente por 60 días y su extensión se definirá en función de las condiciones económicas.
El jefe de Estado mexicano expuso que «para reiniciar sus actividades económicas, EEUU tiene que considerar lo que se produce en México, que forma parte de su cadena de fabricación, porque muchas piezas automotrices y de otras industrias están completamente interrelacionadas».
«Se va a llegar a un acuerdo cuando abran ellos [EUU]», sus actividades económicas anunció el mandatario mexicano.
Las restricciones que autorizan solo «actividades esenciales» en la economía y el comercio bilateral comenzaron el 21 de marzo y el martes 21 de abril México y EEUU prolongaron 30 días más la restricción de viajes no esenciales, ante la pandemia de COVID-19.
«Nos hemos comprometido a analizar las aperturas para ir, poco a poco, regresando a la normalidad productiva en la frontera», explicó el gobernante.
Agregó que la fecha exacta de la reapertura de la frontera «todavía no se decide, porque la epidemia de coronavirus en EEUU les está afectando mucho, desafortunadamente, y nosotros también tenemos nuestra política sanitaria».
López Obrador afirmó que el mismo presidente Trump «ha reconocido que hay cuestiones excepcionales, como los productores agrícolas de EEUU que requieren de trabajadores mexicanos, y así de muchos casos».
La industria automotriz dedicada a la exportación, que es la cuarta parte de las ventas mexicanas al extranjero, «ocupa un millón de trabajadores mexicanos», detalló.
Finalmente dijo que ambos gobiernos analizan la puesta en marcha del nuevo Tratado México, EEUU, Canadá de libre comercio, que ya fue ratificado por los poderes legislativos de los tres países norteamericanos.
La Casa Blanca informó que habrá excepciones para trabajadores que están combatiendo al COVID-19, como los profesionales médicos.
El acuerdo bilateral de cierre parcial de la frontera establece «proteger el comercio bilateral y economía de ambos países, y permitir el acceso a alimentos, combustible, atención médica y medicamentos».
El comercio entre EEUU y México se elevó en 2019 a 612.000 millones dólares, convirtiendo al país latinoamericano en el principal socio de EEUU, relegando a China, en el marco de una guerra comercial de las dos potencias.
Con Información de Sputnik