Todo está planchado para que hoy se autorice el convenio de arrendamiento que permite la construcción de Ciudad Judicial Laboral, utilizando de caja chica una vez más al IPEJAL.
La historia inició el martes por la tarde, cuando por órdenes del gobernador, Ricardo Rodríguez administrador del Gobierno del Estado y Héctor Pizano director del IPEJAL, fueron recibidos por la Junta de Coordinación Política del Congreso de Jalisco con el fin de dejar arregladas las cosas para que en la sesión del día de hoy los diputados al servicio de Enrique Alfaro autoricen un contrato de arrendamiento a 20 años con el IPEJAL.
El contrato a modo con el IPEJAL deja muchas dudas, una de ellas es: ¿Cuándo un arrendador de terreno, construye con su dinero un edificio temporal a gusto del inquilino, para recibir una utilidad mínima a largo plazo?
Con el propósito de que las vacaciones traigan el olvido al tema de la Ciudad Judicial Laboral, todo se «agilizó» para que el día de hoy pase en el pleno la autorización.
Una prisa que en 3 años de la administración de Enrique Alfaro nunca se vio.
La revisión de los presupuestos de los años pasados de esta administración evidencia la falta de interés en construir Ciudad Judicial Laboral con sus propios recursos, como lo marca la ley.
El martes, Marco Valerio, secretario del Trabajo y quién debería haber urgido desde hace años la construcción de la Ciudad Judicial Laboral, visitó el Congreso para exponer las bondades del contrato a firmar, de lo que no habló fue de su responsabilidad en que la Junta de Conciliación y Arbitraje esté saturada de casos, algunos que fueron presentados en diciembre, en pleno mes de abril aún no han sido radicados.
La implementación de la reforma laboral aprobada en 2017, en Jalisco no tiene avance, sin que eso le preocupe al secretario del Trabajo o al gobernador.
Mientras toda esta escenificación se lleva a cabo, el representante de los trabajadores del Estado, Juan José Hernández Rodríguez, secretario general de la FESIJAL, se mantiene en la postura de que no es una inversión rentable y que la construcción de Ciudad Judicial Laboral, no debe realizarse con el dinero de los trabajadores.
Curioso, el que representa a los trabajadores que son quienes ahorran para su jubilación en IPEJAL, está en desacuerdo y los que únicamente administran el dinero ajeno, dicen que todo está bien y la construcción de Ciudad Judicial Laboral va.
La refundación de Enrique Alfaro queda claro, será en otras áreas, porque en el IPEJAL se seguirá usando el dinero de los trabajadores como caja chica del Gobierno del Estado.