El pasado 8 de abril del año en curso, se publicó en el DOF, los nuevos Lineamientos para la Organización, Operación y Funcionamiento de los Consejos Técnicos Escolares de Educación Básica, y como anillo al dedo, con dedicatoria para lo que se hace en la República independiente de Jalisco.
En dicho documento, destaca el peso que se da al Consejo Técnico Escolar (CTE), a quien se refrenda el carácter de órgano máximo de decisión sobre los asuntos educativos de la Escuela, incluso ahora tendrá un Comité de Planeación y Evaluación, mismo que hará patente a cualquier otro órgano escolar o incluso autoridad, sobre la planeación y rumbo de los trabajos del CTE, así como las necesidades, por ejemplo, al Comité Escolar de Administración Participativa (CEAP), para cualquier modificación que se requiera en infraestructura educativa, equipamiento y otras necesidades.
Con lo anterior se destacan 2 temas, el primero que tiene que ver con decidir enviar por un tubo el famoso plan educativo recrea en el estado, porque parece que hoy le dan la autonomía, por fin, a los colectivos docentes, de decidir sobre la discusión, planeación y ejecución de los asuntos que habrá de discutir el CTE, con base en su diagnóstico y necesidades desde su contexto y no desde las oficinas centrales de educación, a partir de las ocurrencias de Recreas. Por otro lado, llama la atención el incluir al CEAP, que sea a través del comité de planeación y evaluación que se envíe las necesidades de lo que se requiere hacer en inversión, mantenimiento y operación en los planteles educativos.
Lo que quiere decir que, el Programa La Escuela es Nuestra (LEEN), llegó para quedarse en la entidad, como en el resto del país. Este programa hoy cuenta con un presupuesto de 30 mil millones de pesos, mismos que van sin intermediarios a las Escuelas a través del CEAP, para que directamente administren y decidan en qué invertirlos, mientras el Estado sigue recibiendo de la federación el Fondo de Aportación Múltiple, que es para infraestructura y equipamiento, cercano a los mil millones de pesos, lo que supone ya un presupuesto similar a lo que se estaría operando desde el estado a partir del fideicomiso del Fondo para la Infraestructura Educativa en Jalisco. De dicho monto Dicho recurso estaría pues llegando como nunca antes en la historia de la educación en México, como recurso para operación de infraestructura y equipamiento anual en cada plantel educativo, jamás en el registro histórico del sistema educativo nacional.
Pero además se reafirma, para el desconocimiento del emecismo en Jalisco y sus máximos representantes, tanto el Gobernador en turno, como el Candidato a Gobernador, que dicen no entregarán la educación de Jalisco a la federación, sin entender que nunca les ha pertenecido. El Sistema Educativo Nacional es único, el 90% del gasto en educación en la Entidad proviene de la federación, constitucionalmente, es responsabilidad del Estado Mexicano, particularmente del poder ejecutivo los planes y programas de estudio que definen e perfil de egresos que desde la constitución se plantea. No corresponde pues a una entidad federativa, hacer ninguna reforma educativa, ni modelo educativo para cada estado, como lo presumen en Jalisco.
Este documento hoy da la pauta para emancipar a los docentes de las indicaciones de la Secretaría de Educación Jalisco, para que la excesiva carga administrativa que representa Recrea pueda ser obviada y centrarse en los objetivos que persigue el Modelo Educativo Nacional, al Estado le corresponde la corresponsabilidad de coadyuvar en el cumplimiento del marco educativo nacional.
Nadie puede entregar lo que no le pertenece, los programas de gobierno que ya son ley como los útiles y uniformes escolares, así como el presupuesto para la infraestructura física educativa, el equipamiento con equipo tecnológico para escuelas y docentes, están garantizados en la Ley de la Entidad, incluso algunos desde sexenios pasados, eso no está en riesgo, lo que se juega hoy es la decisión de continuar otros 6 años entre eventos para fotos y gastos millonarios o la homologación de Jalisco en la Nueva Escuela Mexicana, un proyecto académico hecho también por maestros pero con un marco legal constitucional.